Think Tanks para fortalecer la democracia
jueves, 10 de abril de 2014
Por: José Luis Chicoma, Ana Lucía Dávila Para: Arena Publica
¿Qué es un Think Tank? Cuando le contamos a nuestros familiares, amigos e inclusive a algunos colegas que trabajamos en uno, las preguntas más frecuentes son: ¿Y qué es eso? ¿En qué piensan? ¿Think qué? Hay mucho desconocimiento sobre esta institución que cada vez juega un papel más importante en generar un gobierno responsable y una democracia más efectiva.
¿De qué hablamos cuando hablamos de think tanks? Cuando le contamos a nuestros familiares, amigos e inclusive a algunos colegas que trabajamos en uno, las preguntas más frecuentes son: ¿Y qué es eso? ¿En qué piensan? ¿Think qué? Hay mucho desconocimiento en la sociedad de esta institución que cada vez juega un papel más importante en generar un gobierno responsable y una democracia más efectiva.
El think tank es una institución que, desde finales del siglo XIX, ha transformado los procesos de toma de decisiones. Los primeros surgen en Gran Bretaña con fines de defensa y seguridad. En el siglo XX estos comienzan a aparecer en Estados Unidos y en otros países, cobrando importancia estratégica durante la Segunda Guerra Mundial. El reordenamiento estructural nacional e internacional que generó el fin del conflicto dio lugar a la popularización de estos centros y es en los cincuenta que se les denomina oficialmente como think tank.
Desde entonces los think tanks se han encargado de fungir como el puente entre la academia y los tomadores de decisiones, convirtiéndose en una importante pieza en la construcción de la democracia. Ayudan al sector público a tomar decisiones más acertadas, y acercan el conocimiento y la información a la sociedad civil. Sin embargo, si bien es cierto que estos centros se dedican a la investigación, al igual que la academia, los think tanks tienen un rol mucho más activo en la opinión pública y la toma de decisiones. Estos buscan llevar sus hallazgos a la acción, realizando cabildeo, reuniéndose con diversos actores de la sociedad civil, el gobierno y la academia, y emprendiendo diversas campañas de difusión y divulgación sobre sus temas para insertarlos en el debate de la opinión pública.
En general, los think tanks se dedican a influir en las políticas públicas, sin embargo, existen diferentes tipos de Think Tanks con diversos fines. Por un lado están los “generalistas”, que abarcan una gran cantidad de temas y problemáticas, como el famoso Brookings. En contraste, existen think tanks “específicos”, dedicados a la investigación de un tema o un área de estudio en particular, como FUNDAR con temas de transparencia. Aunque en México no es común, en el mundo existen think tanks tanto partidistas como apartidistas. En esta línea, también los hay abiertamente ideológicos, como Cato Institute, que buscan promover cierta postura política a través de su activismo.
En los últimos años, los think tanks han crecido en popularidad y en importancia, sin embargo en México aún existe gran desconocimiento sobre éstos y su importancia.
Actualmente, en México sólo existen 60 think tanks, mientras que Estados Unidos cuenta con 1,828. Esto quiere decir que por cada 11 think tanks en Estados Unidos, solo hay 1 en México. Las potencias emergentes han reconocido la importancia de contar con estos actores y se han dado a la tarea de aumentar su presencia significativamente en los últimos años. De acuerdo con el Go-To Think Tank Index de la Universidad de Pennsylvania, en comparación con los BRICs, México es el país con menos think tanks. Brasil actualmente cuenta con 81, mientras China tiene 426, Rusia 122 e India 268. En América Latina, destaca Argentina con 121think tanks, entre ellos CIPPEC, uno de los más importantes de la región.
Los rankings pueden ser muy cuestionables, en especial si se construyen sobre variables subjetivas, sin embargo, pueden ser útiles para darnos alguna idea sobre la importancia y éxito relativos. En este sentido, el ranking del programa de Sociedad Civil y Think Tanks de la Universidad de Pennsylvania nos ayuda a entender el estado de los think tanks en el mundo. En 2013 se contabilizaron 6,826 think tanks a nivel mundial. Brookings Institution encabeza el ranking en el puesto #1, seguido por elChatham House de Gran Bretaña y el Carnegie Endowment for International Peace de Estados Unidos. Entre los mejores think tanks de México y Canadá se encuentran Comexi en el puesto #2, seguido porFUNDAR en el #5, el IDE en el #6 y CIDAC en el #17, mientras que en el listado de los think tanks con mejor campaña de cabildeo se encuentraEthos Laboratorio de Políticas Públicas en el número 56 a nivel mundial.
A pesar de los recientes logros de México en esta materia, aún hay mucho por hacer. Países como Nigeria, Corea del Sur y Egipto se han mostrado más activos en esta labor y han logrado situar a sus think tanks en los primeros lugares. México necesita reconocer la importancia que losthink tanks juegan en la democracia y en los beneficios que el apoyo a estos actores puede traer para los procesos de toma de decisiones y, por ende, para el desarrollo del país.
Además de cuestionar y auditar al gobierno, los think tanks también pueden apoyar su labor ofreciendo información, análisis y sustento para la toma de sus decisiones. Así, los think tanks juegan un papel fundamental informando a la sociedad civil y activando el debate público sobre temas de coyuntura, por lo que su labor debe reconocerse y apoyarse en todo país que aspire a una democracia plena y a un desarrollo inteligente.
Por esto, es urgente que México incremente el apoyo a los think tanks y los involucre de manera más activa tanto en los procesos consultivos para la toma de decisiones, desde la elaboración de planes, hasta las discusiones sobre las reformas, leyes y regulaciones. Así será importante no sólo con la intención de contar con su presencia, sino efectivamente tomar en cuentas sus recomendaciones. Además, es importante seguir contando con un marco impositivo que favorezca la deducción impositiva de las donaciones a estas OSCs.